Si te has iniciado en la grabación de vídeo con DSLR te habrás dado cuenta de la dificultad, pero también de las ventajas que supone trabajar en ciertas condiciones. Si bien la ergonomía de nuestras DSLR no es su fuerte, el peso y tamaño, unido a la posibilidad de utilizar una amplica gama de ópticas y su «bajo coste» frente a cámaras de vídeo convencionales ha revolucionado poco a poco el mercado audiovisual. La adaptación de nuestras cámaras para la grabación pasa por la inclusión de ciertos accesorios y/o añadidos que nos faciliten su manejo y trabajo.
Ya hablamos de la captación de sonido o las ayudas para conseguir un mejor enfoque a través de la pantalla de nuestra cámara. Ahora le toca el turno a la rótula de vídeo, como es el caso de la Manfrotto 701HDV que si bien no es de las mejores de la marca sí es un buen punto de partida casi obligatorio.
Manfrotto 701HDV
La realización de determinados movimientos, como paneos horizontales y verticales se tornan complicados con nuestras rótulas de fotografía a excepción de aquellas de 3 ejes que si bien sí podemos realizarlos, son un tanto incómodos. Las rótulas dedicadas para vídeo como la Manfrotto 701HDV y superiores nos facilitan mucho la tarea. De esta forma y manteniendo las patas de nuestro trípode podemos intercambiar las rótulas según la tarea que vayamos a desempeñar: fotografía o vídeo.
Entre sus principales y básicas funciones encontramos la realización de movimientos fluidos gracias a su mango que nos facilita ámpliamente su manejo. Permite movimiento tanto horizontal como vertical, pero al contrario que sus hermanas mayores, no ofrece la posiblidad de frenar o controlar la velocidad del movimiento. Podemos bloquear horizontal y verticalmente el movimiento pero no controlar su velocidad. Algo que debemos tener en cuenta si queremos aprovechar las patas de nuestro trípode, es que necesitamos de una columna que permita nivelar nuestra rótula salvo que usemos nuestro trípode en superficies completamente horizontales, de lo contrario necesitaremos acortar o alargar las patas según nos convenga y fijarnos en el nivel de burbuja de nuestra rótula que tenemos la cámara nivelada.
La rótula Manfrotto 701HDV soporta un peso máximo de 4 Kg que es más que suficiente en la mayoría de configuraciones de nuestras cámaras. Actualmente estoy usándola con una Canon 5D Mak II + 70-200 2.8L + Micrófono Rode y ocasionalmente añado un pequeño panel LED y un duplicador al conjunto. Se trata por tanto de una rótula ligera y bastante compacta que permitirá adentrarnos en el inmenso mundo de los accesorios para vídeo por un precio más que razonable. Yo la compré aquí.
Dentro de la amplia gama que ofrece Manfrotto y partiendo desde este modelo, podemos obtener y contemplar nuevas mejoras. Características como ofrecer una fricción constante al movimiento, dureza, control del balanceo (muy útil), mayor peso soportado y robustez del sistema son características más avanzadas que podemos encontrar en una rótula. El precio y nuestras necesidades harán decantarnos entre una y otra. Como ves, dotar y completar mínimamente a tu DSLR para la grabación de vídeo supone un gasto extra.